De la consulta al timón: experta en medicina familiar asume Dirección Médica de Acrux

9 de octubre de 2023

La Dra. Carolina Cerón lidera la dirección médica de Fundación Acrux, tras una década vinculada a la institución como voluntaria en terreno y apoyo logístico. “Estas iniciativas son maravillosas y las disfruto en el alma”, confiesa.

Hace algunas semanas se realizó el último operativo médico del exitoso programa denominado “Juntos por tu Salud” realizado entre Codelco Distrito Norte, Fundación Acrux, el Servicio de Salud de Antofagasta y Comdes Calama, programa que en su totalidad logró entregar 7.808 prestaciones médicas a pacientes en lista de espera de Calama, Alto El Loa, y Tocopilla, en la Región de Antofagasta, de manera absolutamente gratuita para todos ellos.

Si bien asumió en marzo la subdirección médica de Fundación Acrux y posteriormente la dirección de esa área, la médico Cirujano de la Universidad de Chile, Dra. Carolina Cerón, lleva más de 10 años relacionada con la institución. Su primer acercamiento fue en 2010, cuando un grupo de entusiastas médicos le ofrecieron hacer un operativo en el Hospital de Curacaví, parte de la red de atención que tenía a su cargo como directora del Servicio de Salud Metropolitano Occidente.

“Ahí los conocí y dije altiro que sí porque me iban a sacar la lista de espera en oftalmología y otorrino. Yo misma incluso agarré mi auto el fin de semana, con jeans y zapatillas, y me fui a servir café, transporté a señoras, sillas, lo que fuese para ayudar. Ahí conocí al equipo y empezamos a hacer varias cosas, firmamos convenios y seguimos de algún modo trabajando juntos”, recuerda la especialista en Medicina Familiar, mención niños.

Fue tal la fascinación que tuvo con la fundación, que más tarde se sumó como voluntaria a un operativo médico en Puerto Aysén, en Coyhaique donde, además, trabajó en la coordinación de la ronda médica.

“Fue una experiencia maravillosa, que me llenó el corazón. Fue en ese momento que me enamoré de los operativos. Me encantó la experiencia y por eso me empecé a involucrar cada vez más con Acrux, apoyando en coordinación como subdirectora, en varias cosas. Incluso, formé parte del equipo que impulsó que nos definiéramos como fundación”, cuenta.

De ahí que comenzó a participar en todos aquellos operativos en los cuales se requirió de atenciones en pediatría general, sumando más de 15 experiencias en distintos puntos del país.

“Uno deja su casa, sus hijos, su trabajo, la consulta en el caso de los médicos, pero es tanto lo que te llevas de vuelta, te vuelves con una sensación de que estás devolviendo la mano de lo que la vida te ha dado, de que estás ayudando, de que estás un poco haciendo honor al juramento de cuando saliste de la universidad, entonces realmente es maravilloso tener la oportunidad de hacer este tipo de iniciativas, yo las disfruto en el alma”, detalla.

Desde el 1 de marzo, y tras la renuncia voluntaria de la Dra. Cecilia Borel, asumió la subdirección y posteriormente la dirección médica, en un momento muy especial para esta institución, que está cumpliendo 20 años de historia desde el primer operativo y 10 desde que se constituyó como fundación sin fines de lucro. Además, coincide con la apertura de Acrux a otras áreas como salud Oral, Mental, y cuidado del Adulto Mayor con necesidades no cubiertas, y con las listas de espera abultadas por la pandemia.

“Para mí es un honor asumir este cargo, porque me da la oportunidad de aplicar mi verdadera experticia que es la gestión y la administración, algo que llevo haciendo 30 años. Me siento honrada de que hayan pensado en mí, sobre todo, para ocupar el lugar de Cecilia, que dejó una vara altísima. Ella ha dado su vida por esta iniciativa, trabajó en cuerpo y alma por esto, y por eso es un honor y un tremendo desafío reemplazarla”.

Agrega que “los desafíos son hartos porque con el tiempo la fundación pasó de ser un equipo de amigos y conocidos que se organizaban para ayudar al prójimo como fuese, a una tremenda organización, con una tremenda estructura, con grandes iniciativas y que se impone tareas con alto estándar. Mientras más cosas se hacen, más se complejiza y aumentan los riesgos, aumenta el compromiso que uno tiene con la sociedad que atiende, con nuestras autoridades sanitarias, con nuestra legislación y en general con todos. Es por eso que ahora tenemos muchas más responsabilidades, más obligaciones de las que tenemos que dar cuenta, y donde tenemos que estar seguros de que no vamos a correr ningún riesgo, tanto para nuestros profesionales que nos apoyan y colaboran, pero sobre todo para nuestros pacientes y para la fundación en sí misma”, enfatiza

La diferencia con otras organizaciones

Asimismo, se refiere a los compromisos que se adquieren con todos aquellos que han confiado en la fundación para colaborar en la reducción de las listas de espera y donde su labor será primordial. “La coordinación con las personas que nos piden estos operativos es tremendamente importante porque ya no se trata de ir solo con buena voluntad para ayudar. Ahora tenemos más objetivos, entre ellos resolver la lista de espera no GES, y dar cuenta de las necesidades de la gente, y desde esa perspectiva creo que este cargo es un tremendo desafío, pero me encanta y estoy muy feliz de estar aquí”.

 

Agrega que el crecimiento que ha tenido la fundación era impensado, pero enfatiza que eso hace que los pasos que vienen sean aún más desafiantes y requieran del trabajo colaborativo de todos los que son parte de esta institución. “El tema del crecimiento me ha sorprendido. La fundación ha ido avanzando y logrando cosas que no estaban pensadas en un inicio, pero eso se constituye también en las necesidades que tiene la población. Avanzar en la complementariedad entre lo público y lo privado con las organizaciones sin fines de lucro como nosotros, poniendo sus habilidades y competencias, nos llevará a mejorar la salud de las personas. Como digo, esto ya no es una cosa de solo buena voluntad, aquí existe un sentido y está muy asociado a las necesidades de salud de la población y eso obliga y mueve a todos nuestros stakeholders, a los privados, a las gobernaciones, consultorios, a todos en conjunto para que podamos entregar las atenciones que por una razón u otra el servicio de salud no puede entregar”.

La Dra. Cerón tiene una vasta trayectoria en salud, tanto en el ámbito público y privado, lo que se refleja en sus 33 años de experiencia profesional. En el sector público, fue directora de consultorios de Atención Primaria del Servicio de Salud Metropolitano Central, y más tarde directora del Servicio de Salud Metropolitano Occidente. Mientras que, en el ámbito privado, ha sido directora de Centros Médicos Ambulatorios de Redsalud, y actualmente se desempeña como directora del Centro Médico y Dental Redsalud Parque Arauco.

Y desde esa experiencia, valora y destaca el carácter resolutivo que tiene Acrux, algo que caracteriza a la fundación desde sus inicios. “Creo que eso es algo que nos diferencia de otras organizaciones y es que desde el día uno, desde que partió como grupo de médicos, ha intentado tomar los problemas de los cuales se quiere hacer cargo y resolverlos de una manera integral, llevando todo lo necesario para cerrar el diagnóstico, incluso operar si es necesario. Además, trabajar con los equipos locales de salud para que se mantenga el vínculo y nexo con esos pacientes”, explica.

Respecto de las proyecciones y de cómo le gustaría que avanzara la fundación, apunta hacia una mirada mucho más comunitaria de la salud. “Me gustaría llegar con un equipo de salud que sea capaz de determinar cuáles son los problemas de las personas y su entorno familiar, saber que está pasando, cómo los ayudamos. Ir no solo con la mirada de resolver un problema de salud, sino que dar el aporte de información nutricional, por ejemplo, de salud mental, etc. Sería rico avanzar a una mirada mucho más comunitaria de la salud que podamos entregar. Yo soy nacida y criada en la Atención Primaria y por eso me hace mucho sentido porque la salud no es un órgano enfermo, nuestro estado de salud es el resultado de un montón de condicionantes que nos afectan en el entorno, en nuestra capacidad adquisitiva, en nuestro conocimiento y educación, todo eso afecta al final”, explica.

Una de las cosas que disfruta hacer es viajar, lo que verá intensificado con los operativos médicos de Acrux. Asimismo, destaca su cargo de teniente segunda en Sanidad en la Reserva Naval, que ostenta hace 10 años y que, según comenta “ha sido un ejercicio de humildad extraordinario”.